Haber tomado la decisión de comprar una caja fuerte es quizá una de las ideas más sabias que se pueda tomar en tiempos en los que la delincuencia parece hacer de las suyas ante el silencio de las autoridades.

 

Ser precavidos y resguardar nuestro patrimonio no se trata de paranoia sino de ganarle tiempo a los ladrones que buscan apoderarse de las pertenencias de quienes con trabajo duro se las han sabido ganar.

 

Ahora bien, ya que has comprado una caja fuerte es momento de ponerse manos a la obra e instalarla ¿Pero sabes hacerlo? Descuida, queremos brindarte algunas recomendaciones para que lo puedas hacer en casa.

 

 

Tener una caja fuerte en casa se traduce en seguridad. ¿Y qué mejor que sentirnos seguros de que nuestros objetos de más valor económico y sentimental se mantendrán a salvo de los delincuentes?

 

Hay sitios donde venden cajas fuertes tradicionales, que son esas que vienen con las cerraduras convencionales, pero también las hay con sus sistemas de cerradura electrónica digital.

 

Una vez que hayas seleccionado el modelo de tu preferencia, además del espacio físico donde la vas a instalar, es preciso que sigas estas ocho sencillas recomendaciones para que puedas hacer un trabajo profesional.

 

 

Para empezar, es necesario tomar las medidas de la caja fuerte en su parte frontal, siempre dejando 5 centímetros de más en sus respectivos laterales, 10 centímetros en la base y 15 para la parte superior de la caja fuerte.

 

Hay que verificar la profundidad del espacio donde la instalaremos, por lo que con el uso de un taladro con una broca de widia se puede más o menos medir qué tan profundo es ese sitio que hemos elegido.

 

 

Con la ayuda de un martillo y un cincel abriremos el agujero que ya hemos dibujado con la ayuda de un lápiz de creyón. Para perforar de manera más efectiva, podemos utilizar el taladro para que la pared ceda un poco más rápido.

 

Una vez que el hueco haya sido abierto, ahora es tiempo de trabajar en la base del mismo, por lo que vamos a necesitar unos ladrillos del tipo rasillón que midan cerca de 40 centímetros de largo por 20 de ancho.

 

 

Utilizando las medidas de la caja de seguridad, cortaremos los ladrillos y los iremos pegando en la superficie del agujero donde se instalará la caja fuerte. Para fijarlos, se debe utilizar algún tipo de yeso especial para construcción. Se deben colocar primero en la parte inferior y superior y por último en los laterales.

 

 

El yeso se debe dejar secar muy bien. Antes de colocar la caja fuerte, coloca una superficie de papel aluminio o plástico aislante que se pueda retirar luego de que la hayas colocado. Esto es para no dañar la superficie de la caja mientras se seca el yeso que hemos colocado para fijar los ladrillos de los laterales y las partes superior e inferior del agujero.

 

 

Con el uso de cuñas en la base de la caja de seguridad, la insertaremos dentro del hueco que hemos abierto para ella. El nivel de burbujas se coloca sobre la caja para ir nivelándola. La idea es que quede totalmente plana y al ras de la pared.

 

 

Es momento de hacer una mezcla de hormigón, cemento, arena y grava con agua. Esta pasta que resulte se coloca en los orificios de la caja fuerte que aún queden abiertos dentro del agujero. Siempre se trabaja de arriba hacia abajo y luego hacia los laterales. Con un listón se presiona para que la pasta se compacte a la caja.

 

 

Hay quienes le incorporan varillas de acero de 10 o 12 milímetros para que sea más seguro. Esto se hace antes de aplicar la pasta de hormigón. Las varillas deben estar fijadas a los ladrillos que colocamos previamente.

 

 

Cuando hayan transcurrido 48 horas, verifica que el hormigón se haya secado. Luego aplica una capa de yeso de color negro, que cuando se seque, le aplicarás yeso de color blanco. Pintas la zona deseada y quedará como si allí no ocurrió nada.

 

Cajas Fuertes de Uso General